Opinión
digitalización en hostelería

Ya ha acabado 2022, un año muy convulso. Para el sector se prevé un cierre positivo en general, y mirando de reojo lo que pasara el próximo año. La situación actual y la que se prevé para el 2023, es que se seguirá manteniendo la situación inflacionista y de altos costes energéticos. Y no tenemos que tener los ojos cerrados ante la situación bélica en Ucrania y los posibles movimientos geopolíticos a nivel mundial, aunque este tema nos parezca lejos de una manera u otra nos afectan a todos, es la triste realidad. 

 

¿Y que pasará con la hostelería y la restauración en el 2023? Está claro que vendrán unos meses difíciles, sobre todo al principio del año. Los negocios del sector ante este escenario tienen que estar preparados, tienen que buscar herramientas de gestión que les permita buscar la rentabilidad. Un negocio del sector Horeca estará más preparado ante la adversidad y los imprevistos si cuenta con una serie de factores en su negocio controlados. Disponer de una plantilla fidelizada, estable y satisfecha con su trabajo, es muy importante, sobre todo con la falta de profesionales en el sector. Los procesos internos de trabajo que estén bien definidos, saber qué hay que hacer y quién lo tiene que hacer, es primordial para el negocio.  

 

También disponer de sistemas tecnológicos de gestión digitales claros y fáciles de utilizar, que faciliten el trabajo al equipo, en busca de la rentabilidad del negocio. Una dirección o propiedad que tenga claros los objetivos empresariales. Y por supuesto disponer de una oferta atractiva y que económicamente atraiga a los clientes. 

 

Actualmente todos hablamos de la digitalización, pero ¿Qué es? Y sobre todo para el mundo de la hostelería. Debe ser un medio que les permita a los negocios ser más rentables y eficaces, no es el fin, por mucha digitalización y sin clientes el proyecto está muerto, no se puede subsistir. Los locales del sector tienen que buscar soluciones digitales y tecnológicas que les permita ser más productivos en todos los procesos tanto internamente, como externamente. Las cuentas de explotación tienen que buscar la rentabilidad real, por muchos clientes que tengamos, si las partidas como compras, personal y gastos generales no están bien gestionadas, no se podrá sostener el negocio. Este control es primordial y para eso están las herramientas digitales, estas nos permiten crear procesos de trabajo a los integrantes de la plantilla trabajar de forma ordenada, productiva y eficaz. 

 

Todo lo anterior nos lleva a poder disponer de un potente ERP para la gestión del negocio, es crucial y estratégico disponer de esta aplicación. Poder controlar el alza de precios de las materias primas, los pedidos a nuestros proveedores, nuestro stock en tiempo real, los escandallos para buscar la rentabilidad, la trazabilidad del negocio, la gestión del personal… Son algunas de las operaciones estratégicas que nos permite este tipo de herramientas, al final buscamos ser más productivos, ahorrar tiempo en los procesos y poder tomar decisiones de una manera ágil. 

 

Y por supuesto tenemos las soluciones del front, la que están físicamente en restaurante. Para gestionar de una manera más eficiente nuestra relación con el cliente final.  

 

Hay muchas otras herramientas digitales sin duda, que aportan valor al canal Horeca, pero me quería centrar en estas dos partes del negocio que desde mi punto de vistas son las principales y las más estratégicas. 

 

Me gustaría resumir en una pequeña reflexión. No hace mucho tiempo abrir un negocio de hostelería era sinónimo en la mayoría de los casos de un éxito seguro. Pero el mundo ha cambiado, lo que era un paradigma, ya no lo es. Hay que ponerse manos a la obra, para la continuidad de los negocios. Y Como decía Henry Ford: "La mayoría de las personas gastan más tiempo y energías en hablar de los problemas que en afrontarlos".