María Jesús Gómez TalavánQue la gastronomía española está de moda en medio mundo es un hecho constatable no solo por las aperturas internacionales que llegan de la mano de chefs españoles sino, también, por el desembarco de grandes enseñas que vienen a confirmar el idilio que se lleva fraguando desde hace años con nuestra cocina patria, tanto dentro como fuera de nuestras fronteras.
La última muestra de esta conquista es Tatel. Este distinguido restaurante, al que es asiduo una clientela empresarial muy selecta, sumará muy pronto a sus cuatro sedes -Madrid, Ibiza, Beverly Hills y, la más reciente, Doha (Catar)- otras cuatro ubicaciones que tienen previsto completarse a lo largo del próximo año. Así lo ha confirmado a Caternews el Director General de Mabel Hospitality, Ignacio de la Torriente, la división de restauración del Grupo Mabel Capital, propiedad de Manuel Campos Guallar, Abel Matutes Prats y Rafa Nadal.
Tatel, una embajada de España en el extranjero
El origen de Tatel se remonta a 2014 cuando se abrió la primera sede en Madrid. Desde entonces, el objetivo del Grupo ha sido, primero, consolidar y, luego, crecer. El momento de su expansión llegó en 2021 cuando dio el salto a Beverly Hills (Los Ángeles), en noviembre pasado desembarcó en Doha (Catar), coincidiendo con el Mundial de Fútbol y para 2023 hay previstas tres nuevas aperturas.
A principios de marzo abrirán en Ciudad de México, en una de los barrios más prestigiosos y elitistas de la ciudad, el barrio de Polanco; en el primer semestre se completará la apertura de Riad, donde se ubicará en el emplazamiento más codiciado de la capital saudí, el espacio Bujairi Terrace situado en el Historical Diriyah, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2010; y a principios de verano está previsto inaugurar en Manama, la capital de Bahrein.
Pero no son los únicos estrenos previstos. “Estamos ultimando algunos acuerdos para abrir otros cuatro o cinco restaurantes más entre este y el próximo año”, declara de la Torriente, aunque no desvela en qué países. “Solo puedo confirmar que serán aperturas internacionales en Europa, Oriente Medio y, quizás, en Asia”, matiza.
¿Pero qué tiene que tener un país para contar con un Tatel? “Tatel es un concepto que por posicionamiento de nuestra marca y por el poder adquisitivo de nuestros clientes, nos interesa estar en ciudades de primera fila. Buscamos capitales premium, cosmopolitas y abiertas internacionalmente. En cuanto a ubicaciones, apostamos por las principales arterias de la restauración y por locales de más de 500 metros cuadrados y de una sola planta”, apunta el director general de Mabel Hospitality.
Tatel apuesta por un concepto gastronómico basado en la cocina y en las raíces españolas. El 80% de la carta de todos los restaurantes es común y está basada en nuestra gastronomía. Pero la vocación de Tatel va más allá de ser un restaurante español, su ambición pasa por convertirse en una “embajada de España con una labor de representación gastronómica, por supuesto, pero también, cultural y social”. “Queremos demostrarle al mundo que nuestra cultura culinaria, además de grandes recetas y excelentes productos, es una forma de vida", sostienen desde el Grupo.
El clasicismo vanguardista de Tatel
La cocina de Tatel está comandada por el chef Juan Antonio Medina, que hasta su incorporación a Tatel en diciembre del año 2021 como chef ejecutivo global, ocupaba el cargo de jefe de cocina de Palm Court, el restaurante del hotel Mandarin Oriental Ritz. Formado en los fogones de Zalacaín, Arzak o El Bulli, la cocina de Juan Antonio se define por “poner en valor los productos de nuestra tierra, ensalzar nuestras recetas tradicionales y llevarlas a otro nivel con una propuesta culinaria innovadora”.
Pero Tatel es mucho más que gastronomía. Tatel es en sí mismo una experiencia de diversión, de buen ambiente, de entretenimiento. Hoy en día es muy habitual que los restaurantes amenicen las cenas o las comidas con espectáculos, música en vivo o sesiones de DJ, pero cuando abrió, en el año 2014, no lo hacía nadie. Fue una apuesta y gustó. Tanto, que ahora no podría entenderse una cosa sin la otra. “El 50% de nuestro éxito es haber sabido combinar una gastronomía típicamente española de alta calidad con el entretenimiento, eso es lo que han valorado nuestros clientes y eso es lo que buscan en nuestros restaurantes”, reconoce de la Torriente.
Además de Tatel, Mabel Hospitality cuenta con otra marca, Totó, el restaurante colindante a Tatel en Madrid, inaugurado en marzo del año pasado. Basado en un concepto cien por cien italiano, el grupo también aguarda para él un plan de expansión que arrancará el año que viene con dos nuevas aperturas de las que, de momento, poco se puede avanzar.
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