Jamonerias

La empresa continua su plan de aperturas, una de las últimas en el centro comercial La Farga, en L´Hospitalet (Barcelona), donde empezó su etapa de locales con degustación y, que con el diseño de Tattoo Contract, se abre al concepto tan actual, como es el de “grocerant”, al implementar el servicio de mesa.

Con tal novedad, puede hablarse de una cuarta etapa en la evolución de la empresa desde que en 1982 abrió como carnicería-charcutería, para después, en 2006, exclusivizarse en jamonería; lo que le llevaría al año siguiente a abrirse a la degustación in situ y ahora al citado servicio en mesa. Una progresión que es puntal en su proyecto Enrique Tomas 4.0

En el local de La Farga, la compañía ha invertido 400.000 euros y espera que en los locales que está abriendo últimamente llegue a facturar entre 1 y 1,5 millones al año. Aportación por local que pretende le permita llegar pronto a los 100 millones de facturación al año, puesto que en 2022 terminó alcanzando los 84 millones de euros.

Dicha cifra la podrá alcanzar de forma más fácil, si sus nuevos proyectos resultan un éxito tal como todo lo que Enrique Tomás acomete. Y entre ellos hay que destacar su progresión en los aeropuertos de AENA, esta vez innovando con vending; su entrada en sector hotelero y su mayor internacionalización en EEUU y Japón, además de conservar y ampliar, si cabe, sus mercados en Francia, Reino Unido, Alemania y Andorra.

Esta empresa familiar acaba de lograr contratos para abrir más locales en el segmento travel y anuncia su irrupción en la oferta de F&B de cadenas hoteleras, la primera Meliá, en el sector del vending en aeropuertos y por supuesto, en el de delivery, con plataforma tecnológica propia y alianza con agregadores. A nivel internacional, Miami (EEUU) y Japón, serán objeto de su atención, para abrir nuevos locales.

 

La previsión de la compañía es cerrar 2022, con una facturación de 84 millones de euros, ebitda superior a 7 millones y beneficios 8 millones aunque no desecha superarlas, si logra alcanzar a realizar las aperturas pendientes en el último trimestre del año.

Enrique Tomás. Propietario de la jamonería Enrique Tomás
Enrique Tomás inició su actividad hace 30 años en un puesto de charcutería del mercado de la Salud de Badalona. Con la experiencia acumulada y una gran intuición empresarial, Tomás inició en 1987 la apertura de locales propios en la provincia de Barcelona, para luego crecer en España y en el extranjero. Paralelamente, creó y diseñó la estructura corporativa necesaria para que la gestión de los diferentes establecimientos, con o sin zona de degustación, fuera homogénea, sostenible y rentable.