robotización

Durante los últimos años, una serie de profesionales como Mario Robles o Beatriz Romanos, e instituciones como el Lab del BCC, han ido anunciando que, más temprano que tarde, la robotización entraría “a saco “en las cocinas de los restaurantes. La utopía se ha hecho realidad. Veamos en qué consiste la marca GoodBytz.

Partiendo de las experiencias de las dark kitchen, con motivo de la pandemia, tres emprendedores de Hamburgo crearon una, en el verano del 2022. Tal experiencia les servirá para desarrollar una cocina-robot, basada en IA, que bajo la marca GoodBytz, está siendo de la atención y el interés de la hostelería alemana. Sus platos fueron revalidados por los clientes de la plataforma Lieferando.

El prototipo definitivo fue presentado en la Internorga de Hamburgo en marzo del pasado año y ya venía avalada por la presencia, en el accionariado de GoodBytz, de un fondo como Oyster Bar y una conocida cadena alemana de restaurantes: Block House.

Cómo es el robot-cocina de GoodBytz

El prototipo de robot-cocina tiene apenas 13m2 de superficie y posee ocho módulos cuyo destino y función son: el almacenaje de materias primas e ingredientes; sistemas de cocción; vajillas (bols); envasado y servicio, más otros de limpieza y toma de agua y electricidad. Manejados por dos brazos robotizados, es capaz de elaborar entre 150 y 200 platos por hora y hasta 3.000 en un día.

El sistema permite conectividad con todo tipo de software para control de stocks, escandallos, fichas técnicas y confección, y personalización de recetas. Se calcula que puede llegar a ahorrar un 80% de los costes de mano de obra. Sus creadores han insistido, reiteradamente, que GoodBytz es un asistente-complemento de cocina y no atenta contra el empleo profesional.

El otro partner es financiero y bien conocido: Oyster Bay está detrás del éxito de marcas como Oatly y Air Up. Hay que destacar que GoodBytz está en el punto de mira del contract catering; como demuestra el interés de Sodexo en iniciar trámites, para ver si puede responder al interés de una docena de sus clientes, en cuanto a usar la cocina-robot para los servicios que le piden.

Con el apoyo de los partners citados, en octubre de 2022, Goodbytz logró 12 millones de euros en una ronda de financiación A, que le va a permitir construir un centenar de cocinas y disponer de su propio restaurante flag ship en Hamburgo, a inaugurar este 2024.

Además, está cerrando acuerdos de cooperación con proveedores marquistas de equipos como Palux o Winterhalter.

Las cocinas GoodBytz no se venderán. Los interesados en usarla la alquilarán y pagarán un variable, adicional, según el tipo y cuantía de planta que se elaboren en ellas.

He aquí un ejemplo más de como la cocina de los restaurantes, con la ayuda de la IA, logrará robotizarse. En España ya hay casos que, si no iguales, crecen en esa línea: como el de Remy Robotics, que trabaja en el segmento dark kitchen y que acaba de abrir local en Nueva York.