Jamie Oliver, mundialmente conocido por sus éxitos gastronómicos y algunos fracasos empresariales (insolvencia en Italia en 2019), y Taster, uno de los líderes del food delivery en Europa, se han unido para crear Pasta Dreams, la marca para un restaurante digital tematizado en platos italianos de mucha calidad, además de cumplir con las condiciones saludables y sostenibles.
Los primeros pedidos, contando con agregadores como Uber Eats, han sido servidos en pleno Soho de Londres, a mediados de este mes y ya opera un segundo punto de servicio en París, donde Taster es hegemónico en sus especialidades de comida viet, coreana, pollo frito y burgers con marcas como Out Fry, A Burgers, Mission Saigon, Pepe Chicken y Saucy Buns, a las que ahora se añadirá la italiana Pasta Dreams.
Fundada en 2017 por Anton Soulier, Taster (antes Mission Foods) tiene su sede en Londres con centros también en París, Madrid, Bruselas, Lille, Rouen, Manchester o Estrasburgo, y así hasta 80 ciudades europeas, contando con 120 franquiciados. Sus restaurantes digitales superan ya los 1,5 millones de servicios.
La compañía ha recaudado más de 50 millones de euros en rondas de financiación a través de Octopus Ventures, Rakuten, Battery Ventures, LocalGlobe o Heartcore Capital.
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